El trío de la Jimco EL MARTILLO
Han ido franqueando por separado todas las etapas que los han conducido a esta carrera: primero rivales, luego amigos en todas las carreras de las Bajas habidas y por haber en Norteamérica, sobre todo en Baja California, y por último compañeros de equipo en el Dakar.
Matthew Campbell, canadiense y el decano del equipo (65 años), llevaba tiempo tragando polvo al volante de los buggys Polaris con los que participaba en su región de las Bajas.
Se propuso avanzar y fue subiendo en el escalafón de pilotos aficionados aumentando el nivel de exigencia en cada temporada: "Todos los años me compraba un vehículo con más potencia". Por su parte, los dos amigos mexicanos de Cabo San Lucas, Lucas César Ramírez Jr. y Nicolás Ambriz Suárez, tenían claro el plan desde hacía tiempo: probar suerte en el Dakar tras curtirse en las Bajas.
El primero era piloto profesional y el segundo preparaba automóviles, por lo que pronto llegaron a un acuerdo ante la insistencia de Campbell de vivir nuevas experiencias y dar un paso adelante. "Mi pasión son las carreras y quería aprender cosas nuevas.
Me hacía falta un nuevo objetivo en la vida", explica Cambell. "He vivido muchas cosas: solamente me faltaba esa lección de deporte y vida que es el Dakar".
El año pasado, registrados en la categoría Open Score con su imponente Jimco, terminaron en 52ª posición.
De nuevo juntos en la cabina del camión, los tres siguen aprendiendo este año: ayer obtuvieron el 51º puesto en la primera etapa, dentro del tiempo permitido.
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